¿Vivir juntas sincroniza la regla? ¿Es cierto esto?

¿Vivir juntas sincroniza la regla? Descubre el origen del mito, lo que dice la ciencia actual y por qué sigue tan arraigado culturalmente. Entra y descúbrelo

CIENCIA Y TECNOLOGÍA

9/10/20254 min read

sincronizacion del periodo
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¿Vivir juntas sincroniza la regla? ¿Es cierto esto?

Seguro has escuchado —o incluso vivido— la típica escena: compartes piso con amigas o pasas mucho tiempo con tus compañeras de trabajo, y un día alguien dice “¡estamos todas con la regla al mismo tiempo!”. De ahí surge una creencia popular que se repite desde hace décadas: que cuando varias mujeres conviven, sus ciclos menstruales se sincronizan como si sus cuerpos “conectaran” de forma misteriosa.

Pero, ¿qué tan cierta es esta idea? ¿Realmente existe un fenómeno biológico que sincroniza los ciclos menstruales entre mujeres que viven juntas? ¿O estamos ante una ilusión psicológica reforzada por la cultura?

En este artículo te explicamos de dónde viene esta creencia, qué dice la ciencia actual, y por qué sigue tan viva en el imaginario colectivo, aunque las pruebas digan lo contrario.

1. El origen del mito: el estudio de Martha McClintock

La teoría de la sincronización menstrual tiene nombre y apellido: Martha McClintock. En 1971, esta psicóloga estadounidense publicó un estudio en la prestigiosa revista Nature, donde afirmaba que las mujeres que convivían en residencias universitarias tendían a ver alineados sus ciclos menstruales con el tiempo.

Según McClintock, este fenómeno podía deberse a las feromonas: señales químicas imperceptibles emitidas por el cuerpo humano, capaces de influir en el ciclo hormonal de otras mujeres cercanas. Su trabajo generó un gran revuelo mediático y científico, y durante años fue citado como prueba de que “las mujeres que viven juntas se sincronizan”.

Sin embargo, con el paso del tiempo, comenzaron a surgir dudas sobre la validez de sus conclusiones.

2. Lo que dice la ciencia hoy: estudios recientes y revisión crítica

A medida que avanzaba la investigación en biología y psicología, otros científicos intentaron replicar el estudio de McClintock. ¿El resultado? La mayoría no encontró evidencia concluyente de sincronización menstrual entre mujeres que convivían.

Una revisión sistemática publicada en Psychoneuroendocrinology en 1992 ya advertía que los datos disponibles eran inconsistentes. Años más tarde, un estudio con 186 mujeres chinas que vivían en dormitorios durante más de un año concluyó que no había sincronización, y que cualquier coincidencia en los ciclos era puramente aleatoria.

Además, se detectaron varios problemas metodológicos en el estudio original de McClintock: tamaño de muestra reducido, definición ambigua de “sincronización” y análisis estadísticos poco rigurosos. En definitiva, la comunidad científica actual considera que la sincronización menstrual no está demostrada científicamente.

3. Explicaciones alternativas: percepción, azar y ciclos similares

Si la sincronía no es real, ¿por qué tantas mujeres afirman haberla experimentado?

Una de las explicaciones más sólidas viene de la psicología cognitiva: el sesgo de confirmación. Este sesgo hace que tendamos a recordar con más facilidad los momentos en los que nuestras reglas coinciden con las de otras mujeres, y a olvidar las veces que no. También influye la memoria selectiva y el deseo de encontrar patrones en la realidad, aunque sean ilusorios.

Por otro lado, los ciclos menstruales no son idénticos entre mujeres, pero sí pueden tener duraciones similares, lo que genera coincidencias ocasionales. Por ejemplo, si una mujer tiene un ciclo de 28 días y otra de 30, es normal que eventualmente sus reglas se “encuentren” por azar cada cierto tiempo.

Además, factores como el estrés, la alimentación o el ejercicio pueden influir en la duración del ciclo, lo que podría crear cambios temporales que simulan una sincronización.

4. El papel de las apps de salud femenina: datos a gran escala

La llegada de apps para registrar el ciclo menstrual (como Clue, Flo o Natural Cycles) permitió a los investigadores acceder a una enorme cantidad de datos reales, sin depender solo de la memoria de las participantes.

Un estudio de la Universidad de Oxford, en colaboración con Clue, analizó los ciclos menstruales de más de 1.500 parejas de mujeres cercanas (hermanas, amigas, compañeras de piso, etc.). El hallazgo fue claro: en el 76 % de los casos, los ciclos se alejaron con el tiempo, en lugar de sincronizarse. Solo un 22 % mostró cierta convergencia, y el resto fue aleatorio.

Estos resultados refuerzan la idea de que la sincronización no es un fenómeno biológico, sino una percepción subjetiva influida por casualidades.

5. ¿Por qué seguimos creyéndolo? Mito, cultura y psicología social

Pese a la falta de evidencia científica, muchas mujeres siguen convencidas de que sus cuerpos se sincronizan con los de quienes las rodean. ¿Por qué?

Primero, porque la idea es emocionalmente poderosa: transmite una sensación de conexión, complicidad y pertenencia. En un mundo donde muchas veces la menstruación se vive en silencio o se oculta, compartir el ciclo puede verse como una forma de unión.

Segundo, porque los medios y la cultura popular han reforzado la narrativa. Series, películas y redes sociales reproducen constantemente la idea de la “sincronización femenina”, creando un círculo de retroalimentación.

Y tercero, porque los mitos no necesitan ser verdaderos para ser creíbles: basta con que coincidan con nuestras experiencias subjetivas.

6. Conclusión: lo que realmente sucede cuando convivimos

La ciencia ha hablado con claridad: no hay pruebas sólidas de que los ciclos menstruales se sincronicen entre mujeres que viven juntas. Lo que percibimos como sincronía suele ser una ilusión estadística, reforzada por nuestras emociones, creencias y el deseo de sentirnos conectadas.

Esto no le resta valor a la experiencia femenina ni a la solidaridad entre mujeres. Pero sí nos invita a conocer mejor nuestros cuerpos, no desde el mito, sino desde la evidencia. Porque entender cómo funciona realmente el ciclo menstrual es un acto de empoderamiento.

Para aquellos interesados en profundizar en este tema, pueden consultar nuestro chat de Inteligencia Artificial entrenado, además de algunas otras recomendaciones de lectura y recursos adicionales:

  1. Artículo web“Do Women’s Periods Really Sync Up?” – SELF Magazine

  2. Artículo web“There’s No Scientific Evidence That Women Synchronise Their Menstrual Periods” – Verificat.cat

  3. Artículo web“Surprise: Your Period Probably Doesn’t Sync Up With Women You Hang Out With” – Glamour

  4. LibroEl libro rojo de las niñas de Cristina Romero y Francis Marín – Comprar en Amazon España

  5. DocumentalPeriod. End of Sentence. (Netflix, 2018) – Ganador del Óscar al Mejor Cortometraje Documental, aborda el estigma de la menstruación en la India.

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